Intervención de Daniel Urbaneja. Usuario de Aspanias
Querida Reina.
Soy una persona con discapacidad intelectual, o mejor dicho una persona con una capacidad diferente. En nuestra Casa Aspanias desde hace algún tiempo, preferimos y luchamos por conseguir que se nos conozca por nuestro nombre, me llamo DANI y también hablamos de una palabra nueva, persona con diversidad.
Estoy nervioso y a la vez contento porque puedo hablar con usted, porque puedo contarle que mi vida ha cambiado mucho, estudié y suspendía, estudié en otro lugar y aprobaba y hoy tengo un trabajo.
MARIA (Apoyo): Sería bueno Dani, que nos contaras a todos dónde trabajas
Soy un buen recepcionista. Mis apoyos, como María, me han contado que usted ha hecho mucho por nosotros, que ha hecho o ha mandado hacer leyes, que hoy está aquí para apoyar lo que hemos hecho bien, que nos quiere animar a que sigamos mejorando y a que sigamos luchando por eso que dicen los carteles por toda la ciudad, de ciudadanos de pleno derecho.
MARIA (Apoyo): ¿Y qué le pedirías a su majestad?
Majestad, como los demás ciudadanos, queremos tener las mismas oportunidades y también entendemos que las mismas dificultades.
Pero, después de todo, no me quejo, me siento bien, tengo metas y sueños y quiero pedirle con todo respeto y con todo cariño que siga echándonos una mano, porque una vez oí, que los sueños, si alguien los persigue, se cumplen.
Me siento con fuerza y con ganas de seguir y de conseguir más cosas, más sueños y una vida más feliz
Majestad, muchas gracias.
Gracias también y nuestro cariño para esas estupendas personas que le acompañan en la mesa y todas las que están en este enorme Salón, porque hoy todos habéis conseguido que seamos un poco más felices.
Gracias